El uso correcto de la gramática en una conversación en otro idioma es un tema que genera controversias. Por un lado, los profes de idiomas te dirán que siempre debes cuidar las formas; sin importar la situación en que te encuentres, siempre debes usar bien la gramática. Pero, por otro lado, quien ha viajado o ha vivido en otro país, con otra lengua y otra cultura, te dirá… ¡Y qué más da!
Debemos decirte que ambas opiniones son absolutamente ciertas. Sin embargo, usar correctamente la gramática en una conversación, depende de muchos factores. Dentro de los más importantes están: el contexto, el interlocutor e incluso, el lugar en donde se desarrolla.
Hoy vamos a escudriñar un poco en esto y descubrir de una vez por todas cuán importante es.
¿Listo para romper las barreras idiomáticas?
¡Vamos allá!
El terror que infunde la gramática en una conversación
Como si fuera un fantasma tenebroso, la gramática al hablar en otro idioma infunde escalofríos en muchas personas. Es tanto el pavor que sienten que los congela y los cohíbe.
Y, no creas que esto solo le sucede a principiantes o personas con niveles intermedios. Incluso, aquellos con un nivel avanzado, buena dicción y un rico vocabulario se aterran al hablar. Entonces, ¿qué tiene la gramática en una conversación en otro idioma que asusta tanto? Hay miles de razones, pero todas se resumen en una: ¡Vergüenza!
Sin duda, la vergüenza es la principal razón por la que las personas sienten sudores incontrolables a la hora de conversar en otra lengua.
La forma en la que serán percibidos por el interlocutor, es una razón. La otra, es la frustración por no aplicar las formas gramaticales correctamente, lo que los aterroriza. Aunque no es una regla inalterable, la vergüenza al hablar es mayor entre quienes tienen un nivel lingüístico más avanzado en su idioma materno.
Las personas que usan correctamente la gramática en su propia lengua, a menudo, sienten que su nivel desmejora considerablemente en un nuevo idioma. Esto les hace sentir mucha frustración y, consecuentemente, los hace pensar dos y tres veces cada palabra que van a decir. Como un círculo vicioso, cuidarse de no cometer errores los hace frustrarse más y todo vuelve a empezar.
¿El resultado? Estas personas evitan en la medida de lo posible hablar para no cometer errores. Este fenómeno no es exclusivo de quienes tienen mejores niveles en su lengua materna. Mira otro ejemplo muy frecuente
Otro caso muy común: El miedo a «no encajar»
Es posible que te sientas identificado con este otro caso de terror al uso correcto de la gramática en una conversación en un idioma diferente: El miedo a ser encasillado o incluso, rechazado. Es muy frecuente entre inmigrantes o personas que han sido transferidas a un nuevo trabajo en el extranjero. En estos casos, algunas personas sienten que hablar de forma gramaticalmente incorrecta cause algún grado de rechazo entre personas nativas.
Como puedes intuir, este miedo puede afectar a una persona en muchos aspectos sociales y emocionales. La aprehensión a hablar con otros por miedo a cometer errores, puede llevar al aislamiento social o cerrarse a hablar sólo con quienes comparten su nivel gramatical. Por ello, es muy común ver que los procesos de adaptación a un nuevo entorno pueden ser muy complejos.
Nuevamente, la vergüenza toma el control y se suma a otros elementos que van más allá del idioma y que son muy diferentes en cada caso. El hecho cierto es que, entre las personas que inician una nueva vida fuera de su entorno, hablar de forma correcta crea una barrera gigantesca.
Esto nos lleva a la raíz de todo: ¿La gramática tiene un peso tan grande a la hora de hablar en un nuevo idioma? Cómo verás a continuación, a veces, le damos una importancia que, en realidad, no tiene.
Todo es relativo y depende del entorno
Supongamos por un momento que eres un conferenciante invitado a debatir sobre un tema específico en un idioma distinto al tuyo. También supongamos que debes hablar frente a una audiencia de un altísimo nivel intelectual. Pues bien, aquí sí que importa mucho cuán preciso seas en el uso de la gramática en tu expresión.
Del mismo modo, la gramática exacta importa si eres el nuevo director de una empresa que debe dar informes a la junta directiva.
Sin embargo, en el devenir del día a día, la gran mayoría de las conversaciones se mueven en un entorno menos formal y más cotidiano. En estos contextos es más viable que se te perdone algún error gramatical o incluso alguna barbaridad idiomática. Es más, si «rascas» un poco más en la superficie, pronto notarás que incluso los nativos no son precisamente catedráticos expertos en gramática.
Y eso lo puedes notar en tu propio idioma y entre tu círculo social o familiar más cercano. Usualmente, las personas cometen muchos errores gramaticales al hablar. No es tan común que una conversación entre amigos tenga un nivel gramatical de postgrado en filología. En la cotidianidad, las conversaciones suelen girar en torno al fondo y no a la forma. Por lo que, en un contexto más distendido, informal y cercano, puedes permitirte ciertos errores y no crearán un escándalo monumental.
¡Relax!… ¡Estás aprendiendo!
Existe un factor que se te puede olvidar al tratar de llevar tu conversación al grado superlativo de la perfección: ¡Estás aprendiendo un nuevo idioma! Esta condición debería tranquilizarte, pues en la mayoría de los casos, es natural que el interlocutor deje pasar algún uso incorrecto de la gramática. Lo mismo que sucede cuando no encuentras esa palabra en el nuevo idioma que define lo que quieres expresar.
En fin… ¡Relájate! No hay nada de malo en cometer algún que otro error gramatical en una conversación y poco a poco irás mejorando. Aun así, es muy probable que quieras reducir estas equivocaciones al mínimo. Por ello, mira un par de tips que te van a ayudar a mejorar tu gramática oral.
Algunos consejos para mejorar tu gramática al hablar
Lo dicho. No es lo mismo hablar en un entorno laboral o académico que hablar con el dependiente de una tienda o tus nuevos amigos nativos. Al mismo tiempo, tampoco es lo mismo expresarse en un nuevo idioma de forma escrita y de forma oral. Es decir, a la hora de escribir, aunque sea un mensaje en el móvil, tienes la oportunidad de buscar el significado de una palabra. Inclusive, podrás tirar de un traductor o el corrector de texto de tu ordenador para comprobar si estás diciendo lo que quieres decir.
Además, puedes descargarte una app de traducción como Talkao Translate, para corregir errores gramaticales y ortográficos. Esta app puede traducir de forma rápida y usando la Inteligencia Artificial un texto entero sin importar su extensión. Puede corregir gramaticalmente un email o un Whatsapp en un parpadeo y hacerte quedar muy bien con el receptor del mensaje. Pero, ¿qué pasa en una conversación dónde todo fluye en fracciones de segundo?
Pues bien, aquí es donde todo se puede complicar un poco más. A pesar de que también puedes apoyarte en la tecnología y usar las herramientas de traducción de Talkao, no siempre es tan sencillo. O sea, hay situaciones en las que usar un recurso tecnológico no es tan práctico como parece. Para estos casos, existen una serie de consejos muy útiles que te van a ayudar a mejorar la gramática en tu conversación. Fíjate en los más importantes.
Leer… ¡Y leer mucho!
Este es un consejo que quizá hayas escuchado hasta la saciedad y eso demuestra cuán cierto es. La lectura es el aliado más importante tanto en tu idioma como en un idioma diferente. Al leer, de forma natural, vas fijando en tu cerebro el uso correcto de las formas gramaticales. Adicionalmente, si haces lo que se conoce como «lectura consciente», tu nivel mejorará de forma exponencial. Cada idioma tiene sus propias estructuras gramaticales de construcción de oraciones. La posición del verbo, sujeto y predicado no es la misma para todas las lenguas. Lo mismo pasa con el uso de adverbios, sustantivos y otros recursos de la gramática.
Al leer un texto, bien escrito por supuesto, verás cómo se usan estos recursos y podrás mejorar tu gramática, sintaxis y ortografía. De forma cada vez más fluida, irás trasladando lo aprendido a tus conversaciones.
Graba tus conversaciones y practica
Aunque pueda parecer un poco incómodo al principio, grabarse en una conversación puede ser un recurso muy valioso. Aquí hay dos formas de hacerlo de forma correcta. Puedes grabarte a ti mismo en una conversación ficticia o hacerlo en una conversación con otra persona. Eso sí, asegúrate de pedir permiso a la otra persona para grabar una conversación. En ciertas culturas e incluso, en ciertas legislaciones, esto puede ir desde un abuso de confianza hasta un delito. Si vas a grabar una conversación con alguien más, pide permiso para hacerlo.
Grabar una conversación se convierte en una herramienta fantástica. Aún más, si te apoyas en herramientas de traducción como las apps de Talkao. En un convertidor de voz a texto, puedes repasar la gramática y resaltar aquellos errores cometidos. También, puedes ver cómo la otra persona construye sus frases y destacar aquellas cosas en las que fallas.
Mono ve, mono hace
Si observas una conversación entre niños pequeños, pronto notarás un patrón muy común. Los niños aprenden a comunicarse imitando a los demás en entonación, vocabulario y uso gramatical. Los científicos han definido esto como «neuronas espejo» aunque ya existía un expresión en inglés que lo define: monkey see, monkey do. Mono ve, mono hace.
Imitar a las personas de tu entorno, películas o conversaciones de la calle, te ayuda, mediante la imitación, a mejorar tu gramática conversacional. Esta forma de aprender y mejorar un nuevo idioma es bastante común, pues permite adaptarte a los usos locales, expresiones y nuevas frases. Pero además, te da la oportunidad de construir tus conversaciones de forma más fluida.
Los podcasts, una herramienta muy útil
Los podcasts, suelen ser herramientas poco valoradas, pero de gran ayuda a la hora de mejorar tu gramática en una conversación.
Estas pequeñas discusiones y diálogos entre varias personas son una fuente de aprendizaje valiosa. Asimismo, te permite elegir el contexto y la forma gramatical que quieres mejorar. Si eliges un tema más formal y con invitados de mayor nivel lingüístico, podrás conocer el uso correcto de la gramática.
Por el contrario, si eliges un podcast de corte más juvenil y «callejero» podrás aprender jergas y formas de construcción gramatical menos formal.
Una gran ventaja de este formato es que podrás pausar, retroceder y avanzar cuando quieras. También, tienes la posibilidad de elegir la velocidad de la conversación. A diferencia de un programa de radio podrás ralentizar o acelerar la velocidad si así lo quieres.
Apóyate en la tecnología
Hoy en día, existen una enorme cantidad de herramientas tecnológicas que puedes usar a tu favor. Desde correctores de texto, traductores en tiempo real o aplicaciones específicamente enfocadas en gramática. Todas ellas te pueden dar una información válida y que podrás usar en tu día a día.
Por ejemplo, en el diccionario Talkao encontrarás el significado de una palabra, sinónimos y su forma gramatical correcta. Además, podrás ver ejemplos aplicados en frases y aprender cómo se usa en diferentes conjugaciones, tiempos o acepciones. Estas herramientas te darán recursos lingüísticos muy valiosos para hablar de forma cada vez más fluida. Para cerrar, lo hacemos con el mismísimo Albert Einstein:
«Quien no comete errores es porque no está intentando nada nuevo».
Así que… ¡Equivócate, comete errores y no temas a hablar con los demás! Un mundo nuevo está allí fuera esperando por ti.